Jonathan Knowles, genio fotográfico.

Jonathan Knowles, genio fotográfico.

Hay fotógrafos que te hacen querer agarrar la cámara. Y luego está Jonathan Knowles, que te hace querer tirarla por la ventana, porque sabes que jamás lograrás lo que él logra. No es exageración. Lo suyo no es fotografía: es alquimia visual. Lo que toca se convierte en deseo líquido, en deseo en sí.

LA FÓRMULA SECRETA: LUZ, LÍQUIDO Y LOCURA

Knowles, una cretura salida de Londres, es el tipo de fotógrafo que podría hacer que una gota de agua compita con la Mona Lisa en cuanto a magnetismo. Especializado en naturaleza muerta gráfica, fotografía líquida y belleza, su obra se sitúa en el umbral entre la publicidad, el arte y la psicodelia elegante. No hace bodegones. Hace espectáculos microscópicos que explotan frente a tus pupilas.

¿Qué lo hace distinto? Su técnica. En lugar de manipular todo en postproducción como los vagos del CGI, Knowles apuesta por el efecto real, la física pura y dura, el momento preciso donde el líquido, la luz y el objeto se alinean como planetas en conjunción estética.

UN MAESTRO DEL TIEMPO (Y DEL TIMING)

No hay trampa. Solo una obsesión quirúrgica por capturar el instante. Utiliza cámaras de alta velocidad, flashes de sincronización milimétrica, y construye sets físicos reales, en donde el movimiento del líquido es coreografiado como si fuera una función de ballet para objetos inanimados. ¿Quién necesita modelos si puedes hacer que una gota de jugo parezca la protagonista de un fashion film?

Además, Knowles también ha desarrollado colaboraciones con científicos y expertos en dinámica de fluidos para entender cómo controlar el comportamiento de líquidos complejos. ¡Sí! El tipo que hace comerciales de shampoo también es una especie de hechicero de la física aplicada.

MARCAS QUE LE VENDEN SU ALMA

Si ves una campaña de Absolut Vodka, Dove, Coca-Cola o Guinness donde un líquido baila como stripper iluminado por neones de los 80, es muy probable que sea de Knowles. Ha trabajado para marcas que entienden que vender belleza es vender experiencia visual, y que el contenido de la botella vale tanto como su halo fotográfico.

Su serie “Aqueous” lo consagró como un dios menor de la fotografía líquida. Esa colección es el equivalente visual de una canción de Massive Attack: densa, elegante, fluida, hipnótica. Una orgía cromática que flota en el espacio como si el universo se derritiera en slow motion.

PREMIO, TRONO Y LEYENDA

Jonathan Knowles no necesita tu aprobación. Ya está en la historia. Lleva más de 10 años consecutivos apareciendo en los libros “200 Best Ad Photographers Worldwide” de Lürzer’s Archive, ha ganado Graphis Gold y ha sido reconocido como uno de los 10 fotógrafos más premiados del mundo. Mientras tú y yo seguimos luchando por subir una foto decente a Instagram, él está redefiniendo lo que puede ser una fotografía comercial.

¿ARTE O PUBLICIDAD?

Knowles se mueve como pez en el agua en esa zona gris (y gloriosa) donde lo publicitario se convierte en arte. Es uno de los pocos fotógrafos contemporáneos que ha logrado que un retrato de un producto sea igual de impactante que una pintura renacentista. Porque su talento no está en hacer que algo se vea bonito. Su talento está en hacer que lo quieras ahora, que lo necesites, que lo ames sin saber por qué.

¿DÓNDE VER SU TRABAJO?

Puedes ver su portafolio en su sitio oficial:
👉 www.jknowles.com

Y también en Instagram (@jonathanknowlesphotography), donde sube desde explosiones de colores líquidos hasta retratos minimalistas con sabor a galería de arte contemporáneo en Berlín.

Sobre el Autor

Carlos Espino

Profesor de mercadotecnia, aparentemente; aunque, según sus propias palabras, no es más que un vago con múltiples ocupaciones.