Bad Bunny fue anunciado como el artista principal del show de medio tiempo del Super Bowl LX, que se celebrará el 8 de febrero de 2026 en el Levi’s Stadium, en Santa Clara, California. El anuncio fue realizado por la NFL, Apple Music y Roc Nation, la productora de Jay-Z, durante un partido de la NFL.

En un comunicado, Bad Bunny expresó que esta oportunidad va más allá de un logro personal: «esto es por mi gente, mi cultura y nuestra historia». Por su parte, Jay-Z elogió el impacto cultural del puertorriqueño y su capacidad de conectar con audiencias globales. Curiosamente, el artista recibió la noticia mientras se entrenaba y, en un impulso de emoción, comentó que hizo 100 dominadas tras la llamada de Jay-Z.

El Super Bowl LX (60º campeonato de la NFL) será transmitido por NBC, con cobertura en español por Telemundo y plataformas de streaming como Peacock y NFL+.

El espectáculo y las expectativas artísticas

El show, producido por Roc Nation y dirigido por el experimentado Hamish Hamilton, promete ser un despliegue visual impactante. Se espera un escenario masivo con uso intensivo de tecnología LED, pirotecnia y efectos de videomapping que proyecten símbolos de la cultura puertorriqueña y latinoamericana. El vestuario, un sello distintivo de Bad Bunny, probablemente mezclará moda urbana con elementos culturales, con múltiples cambios a lo largo del show.

En cuanto a la música, se anticipa que el artista recorrerá sus mayores éxitos, mezclando himnos globales con cortes de su álbum más reciente. La presentación será predominantemente en español, cumpliendo su promesa de representar a su gente, lo que podría incluir momentos de homenaje a la historia del reguetón y el Latin trap.

La reacción de los fans y los posibles invitados sorpresa

El anuncio de Bad Bunny como artista principal generó una ola de euforia en redes sociales. Inmediatamente, los fans comenzaron a especular sobre los posibles invitados, una tradición clave en el halftime show. Los nombres más mencionados incluyen a figuras legendarias como Daddy Yankee para un homenaje al reguetón, a J Balvin para revivir la energía de sus colaboraciones, y a Tainy, el productor detrás de muchos de sus éxitos. La presencia de invitados sorpresa no solo daría variedad al espectáculo, sino que también serviría para contar la historia del impacto de la música latina en la cultura pop global.

El show como punto cumbre de su carrera

Esta presentación en el Super Bowl LX no es un concierto más; es un evento cuidadosamente planeado que se inserta en su agenda como la única actuación en Estados Unidos dentro del contexto de su gira mundial. Esto eleva la importancia del show, convirtiéndolo en un punto culminante de su carrera y un evento exclusivo para sus fans en Norteamérica. Además, el Levi’s Stadium es un recinto con historia que, al ser la sede de la celebración por los 60 años del Super Bowl, añade un peso simbólico al espectáculo. Bad Bunny no solo estará actuando, estará formando parte de un legado, uniendo su historia con la de un evento deportivo y cultural de talla mundial.

Los retos de un show en el escenario más grande

A pesar del alcance global de Bad Bunny, su presentación enfrenta desafíos. El principal es la limitación de tiempo: en solo 12-15 minutos, debe condensar una carrera llena de éxitos, ofrecer un espectáculo memorable y transmitir su mensaje cultural. Lograrlo requerirá una coreografía fluida, una producción impecable y una selección de canciones que mantenga la energía en todo momento.

Otro reto es la presión de las expectativas, ya que su show será inevitablemente comparado con actuaciones icónicas del pasado, como la de Shakira y J. Lo en 2020, donde, por cierto, Bad Bunny ya tuvo una participación como invitado especial. Sin embargo, si logra equilibrar su autenticidad con las demandas de un evento global, su show podría convertirse en una de las presentaciones de medio tiempo más comentadas y aclamadas de la historia.


Échale un vistazo al anuncio del artista del show de medio tiempo del Super Bowl 2026….