¿Una nueva era en incomodidad aérea?
¿Te imaginas volar prácticamente de pie? Esa es la nueva propuesta de varias aerolíneas de bajo costo, que buscan maximizar el número de pasajeros por vuelo con un tipo de asiento vertical conocido como SkyRider. Este diseño fue presentado por la compañía italiana Aviointeriors, y ha reavivado el debate sobre hasta qué punto se puede sacrificar la comodidad por el beneficio económico.
Los asientos semiparados, o “saddle seats” (asientos tipo montura), no son una idea nueva, pero ahora están más cerca que nunca de hacerse realidad. Según los desarrolladores, este modelo permitiría a las aerolíneas aumentar hasta en un 20% la capacidad de pasajeros, manteniendo al mismo tiempo estándares mínimos de seguridad exigidos por organismos como la EASA (Agencia Europea de Seguridad Aérea).

¿Cómo funcionan estos asientos?
El diseño de los SkyRider se basa en una posición “semisentada”. Es decir, el pasajero no se recuesta ni se sienta totalmente: queda inclinado sobre una montura similar a una bicicleta. Las piernas permanecen parcialmente extendidas, y el respaldo tiene una inclinación mínima. Este sistema reduce el espacio entre filas a solo 58 centímetros, comparado con los 76-81 centímetros estándar.
Aunque esto puede sonar como un castigo medieval, Aviointeriors asegura que su sistema está pensado para vuelos de corta duración (menos de 2 horas) y ha sido estructuralmente probado para soportar turbulencias y cumplir con los requisitos de seguridad.
¿Por qué las aerolíneas los quieren?
Las razones son principalmente económicas. En un contexto donde el combustible, mantenimiento y personal aumentan los costos operativos, agregar más asientos por avión representa un beneficio directo: más boletos vendidos por vuelo.
Además, las compañías de bajo costo como Ryanair y Viva Aerobus ya han mostrado interés en modelos alternativos de asientos. Michael O’Leary, CEO de Ryanair, ha sido uno de los defensores más vocales de asientos verticales, incluso bromeando con “boletos de avión a 1 euro si el pasajero va de pie”.
Controversia en redes y organismos reguladores
No todos están encantados con la idea. Organizaciones de derechos del pasajero, sindicatos de pilotos y usuarios en redes sociales han criticado duramente la propuesta, calificándola de “inhumana” e “insalubre”.
Se han planteado dudas sobre la fatiga muscular, la circulación y la seguridad en caso de emergencia. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) todavía no ha aprobado este tipo de asientos, aunque algunos países han comenzado a evaluarlos experimentalmente.
¿Deberías preocuparte como pasajero?
Si viajas con frecuencia en vuelos económicos, sí. Aunque los asientos semiparados aún no están implementados, su presencia en ferias internacionales y solicitudes de patente indican que están en marcha. En 2025, podrían iniciar vuelos piloto en rutas nacionales de Europa o Asia.
Esto no significa que todas las aerolíneas los adoptarán, pero es probable que algunas comiencen a ofrecer tarifas ultra low-cost con este formato. Volveremos a pagar por lo básico: espacio para sentarse.

¿Por qué esto debería interesarte?
El rediseño de asientos no solo es una cuestión de comodidad: es un espejo del modelo económico que siguen muchas aerolíneas. En busca de reducir costos y aumentar ganancias, estas empresas están transformando la experiencia del pasajero, muchas veces sin considerar el impacto a largo plazo en salud, bienestar o incluso derechos básicos.
Este debate se conecta con preguntas más amplias: ¿hasta dónde estamos dispuestos a renunciar por viajar barato? ¿Qué derechos como consumidores deberíamos exigir en vuelos comerciales?
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