Hay una fantasía recurrente en cada conversación de sobremesa donde se habla del crimen: “Si existiera un Batman, esto ya estaría arreglado”. Pero no, no lo estaría. Porque si Batman patrullara las calles de la Ciudad de México, el primer día acabaría con un tiro en la cabeza cortesía de un cártel local, o peor: sería detenido por la policía, acusado de alterar el orden y extorsionado por llevar un batimóvil sin placas.
Porque la verdad, y esto duele, es que la CDMX no necesita un superhéroe; necesita una auditoría.

La Unión Tepito no se detiene con batarangs
En Gotham, los criminales usan trajes de payaso y tienen nombres de villano de caricatura. En la CDMX, los verdaderos enemigos públicos tienen nombres como La Unión, Los Rodolfos o CJNG, y no lanzan risas psicóticas, lanzan granadas. Aquí no basta con intimidar. Aquí el crimen organizado no teme a las capas ni a los gadgets. Teme a una cosa: perder el control del negocio.
Un Batman real, sin millones de dólares en gadgets, con un sueldo de freelance y armadura de moto Itálika, no duraría ni una semana patrullando Iztapalapa o Tláhuac. Porque aquí los villanos están en la nómina del gobierno, no en el manicomio.

El verdadero superpoder: viralizarse en TikTok
Ahora imaginemos que nuestro Batman chilango sí sobrevive. Que logra enfrentarse a ladrones, asaltantes y extorsionadores. ¿Lo dejarían operar? Claro que no. Sería cancelado en redes por actuar sin perspectiva de género, acusado de “vigilantismo” por la autoridad, y de “andar de ridículo” por Twitter. Porque aquí no basta con ser héroe, hay que ser viral, woke, y tener Instagram estético.
Pero hey, si graba su primer golpe con un POV bien producido y un edit de Peso Pluma, tal vez lo contraten en una campaña de seguridad ciudadana de la Benito Juárez.

Spoiler: Ciudad Gótica no es tan diferente a la CDMX
Lo que duele no es que Gotham se parezca a la Ciudad de México. Es que nosotros le ganamos en cinismo, en corrupción y en creatividad delictiva. Gotham tiene caos. Nosotros tenemos caos con presupuesto recortado, sin patrullas y con policías que desaparecen si no hay celular grabando.
Y si algún día aparece un justiciero nocturno, un Batman de la Narvarte o del Ajusco, no lo van a convertir en símbolo de esperanza, sino en meme, y luego en mártir. Porque aquí, los héroes duran lo que tarda una bala en cruzar una calle mal iluminada.

¿Quieres justicia? No busques un murciélago. Exige un sistema que funcione. O al menos, uno que no te cobre mordida por respirar.
Referencias de consulta
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Animal Político. (2023). Estos son los cárteles que se disputan el control de la CDMX. Recuperado de https://www.animalpolitico.com
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México Evalúa. (2024). Radiografía del crimen en la CDMX: amenazas, actores y omisiones. Recuperado de https://www.mexicoevalua.org
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Infobae. (2024, febrero 21). La Unión Tepito, los Rodolfos y el CJNG: así operan los grupos criminales en la capital del país. Recuperado de https://www.infobae.com
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InSight Crime. (2023). Crimen organizado en México: dinámicas criminales en expansión. Recuperado de https://insightcrime.org
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Observatorio Nacional Ciudadano. (2023). Reporte sobre delitos de alto impacto en la Ciudad de México: enero-diciembre 2022. Recuperado de https://onc.org.mx
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Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP). (2024). Incidencia delictiva del fuero común por entidad federativa. Recuperado de https://www.gob.mx/sesnsp
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Aguilar, R. (2023). El vigilantismo como fenómeno urbano: del héroe al peligro social. Revista de Ciencias Sociales Urbanas, 18(2), 45–67. https://doi.org/10.22201/rcsu.2023.18203
